La reina Isabel II recibió flores de Debbie, de siete años, del Centro Infantil Sunnyside y del Orfanato Neil de Heathfield (operado por las Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paúl) el 28 de junio de 1959 en el Estadio Richardson, en Kingston, ON. El príncipe Felipe, duque de Edimburgo, y el alcalde de Kingston, William T. Mills, observaron. Fotografía publicada originalmente en la portada del Kingston Whig-Standard, el 29 de junio de 1959.
POR VERONICA STIENBURG, ARCHIVISTA
Tras el fallecimiento de Su Majestad la Reina Isabel II, nos tomamos este tiempo para reflexionar sobre los recuerdos de su Visita Real al Canadá en 1959 tal como lo experimentaron las Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paúl. La reina Isabel II y el príncipe Felipe visitaron Montreal el 25 de junio y Kingston el 28 de junio como parte de su gira real canadiense en 1959. Como parte de su gira en Kingston, atravesaron el terreno de St. Mary’s of the Lake y pasaron frente a la Casa de la Providencia (Providence Manor).
Dos Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paúl asistieron a la Cena y Baile Cívico celebrada en el Hotel Queen Elizabeth en Montreal el 25 de junio de 1959 con la Reina Isabel II y el Príncipe Felipe y fueron mencionadas en la edición del 26 de junio de 1959 del diario el ‘Montreal Star’:
“Las invitadas lucieron sus vestidos más atractivos, sus mejores joyas y pequeñas pieles. Pero dos invitadas lucieron un tipo de vestimenta que las diferenciaba de todas las demás. Sor Mary Melanie, administradora del Hospital St. Mary’s y sor Mary Felicitas directora de la escuela de enfermería, que anoche cenó con la Reina, tienen el hábito de las Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paul.”¿No fue maravilloso que pudiéramos venir todas?”, dijo la Hermana Mary Melanie. “Es un gran privilegio, porque la Reina no viene todos los días”.
La visita al Hospital St. Mary’s of the Lake está registrada en los Anales Congregacionales de las Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paúl:
28 de junio de 1959 – A todas las Hermanas que se sintieron capaces de ir a St. Mary’s of the Lake para la salida, se les permitió hacerlo esta tarde, para que pudieran ver a la Reina. Su Majestad la Reina Isabel y Su Alteza Real el Príncipe Felipe recorrieron los terrenos frente al hospital donde los pacientes estaban bien acomodados en sillas de ruedas, para que tuvieran una buena vista de la reina y la fiesta cuando pasaban. Fue un privilegio recibir este homenaje y un lindo gesto por parte de los funcionarios a cargo. La Madre María Electa y la Madre María Alban aceptaron una invitación especial a Fort Henry, donde se presentó un delicioso programa para el entretenimiento de la Fiesta Real y los invitados reunidos. En St. Mary’s of the Lake, se preparó un delicioso almuerzo para las Hermanas. Bebidas frías, etc., que fueron muy refrescantes y que disfrutamos inmensamente, especialmente porque la tarde era extremadamente cálida.