
Desde la izquierda: MPP Sophie Kiwala, Hermana Gayle Desarmia y la Hermana Diane Brennen.
La Hermana Diane Brennen habló para la Cosecha Comunitaria de Kingston en el segundo evento conmemorativo del 150º aniversario del Canadá, que se llevó a cabo el pasado 30 de agosto de 2017.
A la Hermana Gayle y a mí nos complace ser una parte de esta celebración conmemorativa del 150º aniversario del Canadá, patrocinada por la Cosecha Comunitaria de Kingston.
Las Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paul fueron fundadas en 1861, seis años antes de la Confederación. Desde el principio las Hermanas estaban preocupadas de proveer a los más vulnerables de una alimentación nutritiva. En los primeros días de la Congregación contaban con la caridad para poderse alimentar a sí mismas y a los ancianos, huérfanos y enfermos que cuidaban en la Casa de la Providencia, hoy día conocida como Providence Manor. Las Hermanas fueron a recaudar fondos en el condado, pidiendo donaciones de comida y vegetales para poder alimentar a los más vulnerables a quienes cuidaban.
Nuestros anales de 1893 documentaron varios viajes al condado para colectar comida fresca en aquel mes de septiembre. El Reverendo Kelly de Athens escribió a la Superiora General en ese entonces: “Las buenas Hermanas son cordialmente bienvenidas aquí para recoger vegetales o cualquier cosa que puedan obtener en mi misión. Ellas podrán obtener una gran variedad de vegetales aquí, tenemos buenos cultivos.”
La propiedad actual donde está situada nuestra Casa Madre en el número 1200 de la Calle Princess, es mejor conocida como Heatfield. Este fue el nombre de la granja que fue comprada por la Congregación en 1930. Siempre ha tenido árboles frutales y jardines de vegetales para el uso de las Hermanas así como para los pobres de Kingston. Cuando la Hermana Gayle entró dijo que la despensa tenia jarras y más jarras de ciruelas en preserva, una fruta le perdió el gusto después porque se servía continuamente como postre.
En 1999 empezamos el Santuario de Semillas de Herencia que ha florecido y ha proveído de educación a otros jardines para que estos puedan empezar sus propios jardines de herencia en el área. Por quince años mantuvimos un día al año de probar tomates, con las muchas variedades de tomates de herencia de nuestro santuario.
Nuestros planes futuros para la Villa de la Providencia incluyen jardines comunitarios.
Cuando hace dos años las Hermanas formaron su Declaración de la Misión actual, la terminamos con esta declaración: “Compartiendo nuestros recursos espirituales, humanos y financieros, promovemos la justicia y la paz para toda la creación.” Esto incluye nuestro apoyo a la seguridad alimenticia, el salvado de semillas y la jardinería.
Como comunidad las Hermanas han apoyado a la Cosecha Comunitaria de Kingston desde su fundación tanto financieramente como con personal de trabajo. Les deseamos bendiciones continuas en su trabajo con la tierra, los jardines y el mercado.

Tara Kainer de la Oficina de las Hermanas de la Providencia de Justicia, Paz e Integración de la Creación y miembro del Grupo de Cosecha Comunitaria de Kingston nos cuenta los eventos del día.
La Cosecha Comunitaria de Kingston y sus socios celebraron los 150+ años de los mercados de agricultores de Ontario con un día de comida, vestimenta apropiada y música además de contar con la presencia de los vendedores regulares que siempre están en el sitio. Muchas personas asistieron al evento incluyendo el Miembro del Parlamento que representa a Kingston y las Islas, Sophie Kiwala, así como Bryan Paterson, el Alcalde de Kingston y James Brown, Presidente de la Junta de Centros de Salud de la Comunidad de Kingston.
Los asistentes del mercado fueron invitados a pedir prestados disfraces de la época para este evento si así lo deseaban, gracias a la asociación con el Club de Disfraces Históricos de Kingston. El mercado también incluyó a artistas y artesanos, entre ellos a los Hilanderos y Tejedores de Kingston. Otras exhibiciones incluyeron a los cuidadores de abejas, los hacedores de velas, los productores de miel de maple, y animales vivos como gallinas, pichones y conejos que fueron traídos desde su casa por la estudiante de Trabajos de Verano Canandiense CHK, Olimpia Sienkiewiez. El Santuario de la Ciudad de Kingston y los Mejores Principios para los Niños de Kingston pusieron unos estantes de información y Cate Henderson del Santuario de Semillas de Herencia de las Hermanas de la Providencia condujo un taller de cómo salvar semillas de tomates.

Añadiendo más a la diversión hubo paseos en carretas y caballos, música en vivo con los Blue Grass Hoppers, y juegos antiguos para niños que incluyeron “un huevo en una cuchara” y carreras en tres piernas.
Se sirvió comida preparada a la antigua correspondiente también a la época histórica, comida gratuita que incluyó una variedad de quesos hechos localmente, salchichas secas y condimentos. Un dulce duro tradicional, el cual se produjo primeramente en las colonias de Norte América a principios del siglo19, fue también ofrecido. El “Club de Sopa” de Kingston, proveyó sopa vegetariana de chicharos, la cual se hizo con ingredientes cultivados en el jardín orgánico de CHK. El vendedor de Cosecha Comunitaria de Mercado, Ernie Sands, sirvió más de 300 elotes, y yo horneé los “comunes pastelitos para la hora del té” de Catherine Parr, como postre. Otras comidas que se pusieron a la venta fueron las de Chris Shelley, dueños de la Comisaría General de Brock (¡comida etiquetada que vale la pena luchar por ella!)
Ahora en su novena estación, la misión de la Cosecha Comunitaria de Mercados es la de educar a las personas acerca de los beneficios de la comida nutritiva, el poder tener más acceso a comida local que esté a buen precio y construir una comunidad, particularmente en el vecindario de Rideau Heights, al norte de Kingston.
El primer evento de los 150 años del Canadá ocurrió en julio cuando CHK en conjunción con el Comité para el Día Nacional de los Aborígenes y Consultando Tres Cosas honraron a los aborígenes de las Primeras Naciones en Kingston y su área. Ambas iniciativas se hicieron posible gracias a la Cosecha Comunitaria de Kingston, con más de 30 dedicados voluntarios. Fue financiado por el Fondo Comunitario para los 150 años del Canadá, una colaboración entre la Fundación Comunitaria para Kingston y su área, el Gobierno del Canadá y líderes extraordinarios de costa a costa.
