
Autorretrato de un niño soldado en el norte de Uganda.
Cortesía de Niños y Jóvenes como constructores de la Paz.
POR JAMIE SWIFT
Un proyecto fascinante nuevo de Búsqueda de Paz, con base en la Red, proveerá muy pronto a los maestros de una herramienta innovadora para ayudar a los estudiantes a aprender acerca de la guerra y la paz – a través de la mirada de los niños.
A diferencia de muchas lecciones del Día de la Conmemoración y las enseñanzas convencionales de historia, la Guerra y los Niños no tienen un mensaje patriótico. No hay historias de heroísmo. Ningún sacrificio de solados por una noble causa. No hay ningún enfoque trasnochado de nosotros contra ellos para explicar la guerra.
Hay, sin embargo, una enriquecida variedad de fotografías, dibujos, videos y textos, lamentándose acerca de la tragedia de guerra. Y lo que es único acerca de la Guerra y los Niños es su enfoque centrado en el niño.
“La guerra parece algo muy remoto para estudiante que aprenden acerca de ella de manera tradicional,” dijo la maestra retirada Judi Wyatt, leal miembro de Búsqueda de Paz en Kingston.

Niño y solado.
Búsqueda de Paz se hizo cargo de la Guerra y los Niños en cooperación con Niños y Jóvenes constructores de la Paz (CAP), una organización que trabaja con personas jóvenes en conflicto/ situaciones posteriores al conflicto.
La fundadora de CAP, Linda Dale, ha conducido muchos talleres de arte con personas jóvenes en una variedad de situaciones de conflicto. El trabajo artístico producido en estas sesiones por niños, muchos de ellos jamás habían tomado un pincel antes del taller, se pueden encontrar en la red. Ahora estos dibujos se están poniendo a la disposición – sin cargo alguno – a maestros Canadienses.
“Estos no son dibujos sofisticados y pinturas,” explica Guerra y Niños. “Pero ello no hace menos su fuerza. En vez, su poder viene de la experiencia de vida… Las personas jóvenes nos invitan a acompañarlos, a posarnos a su lado conforme nos brindan un mapa de lo que significa ser un niño soldado, presente dentro de un genocidio, o encontrar dignidad en ser un refugiado.”

La mano de un niño, Colombia
El sitio en la Red también presenta anuncios, cintas cómicas y música popular para ayudar a la gente joven a entender las conexiones entre la vida militar y la vida civil tal y como se han ido forjando desde la Primera Guerra Mundial. La Guerra y los Niños ofrece un espectáculo de transparencias en el uso de niños en los tiempos de guerra como herramientas de propaganda así como explicaciones de como los militaristas han jugado con las nociones tradicionales de masculinidad y femineidad para promover la guerra. Antes de la Primera Guerra Mundial, políticos influyentes y generadores de la opinión publica alegaban que los niños varones se estaban haciendo afeminaos y que carecían de masculinidad. La guerra era entonces aparentemente el remedio, la oportunidad para demostrar valentía y fortaleza.
“Cuando la Primera Guerra Mundial se declaró en 1914,” concluye Guerra y Niños, “miles de hombres jóvenes corrieron a la oficina de reclutamiento. Estaban ansiosos de ser parte de esta gran aventura.”
Como sabemos, los niños tienen afición por las aventuras. Búsqueda de Paz espera que, en una era que glorifica a la guerra a través de juegos de videos ultra-realistas, la Guerra y los Niños servirá como un antídoto modesto a este tipo de pensamiento corrosivo. El sitio en la Red ofrece solamente pequeñas secciones de texto, respaldándose por imágenes irresistibles para hacer estas conexiones. Una galería muestra fotografías famosas de guerra, en su mayoría mostrando a niños.
La idea aquí es la de “llevar al espectador al corazón de las experiencias de guerra de los niños y comunicar verdades fundamentales acerca de la realidad de la guerra.”

Las fotos son cortesía de Niños y Jóvenes como constructores de la Paz.
Una imagen está considerada como la fotografía más conocida del siglo veintiuno. Muestra a Phan Thi Kim Phuc de 9 años de edad, huyendo con otros niños Vietnamitas después de haber sido bombardeado con napalm Americano. La señora Phuc, quien ahora vive cerca de Oshawa, sobrevivió y aun hoy sus heridas de guerra siguen siendo tratadas. Inicialmente ella odiaba esta fotografía famosa, ya que expone el trauma de esta terrible experiencia personal. Sin embargo, eventualmente cambio de parecer, describiendo a la fotografía como “un camino para la paz.”
“Me di cuenta – dijo ella, “que si yo no podía escapar a esa fotografía, me gustaría entonces trabajar con ella para la paz. Y esa ha sido mi elección.”
La esperanza ahora es que los maestros a lo largo del Canadá usen Guerra y Niños para ayudar a la gente joven a entender la realidad de la guerra.
Dice Judi Wyatt, “Este sitio en la Red muestra que tratando de resolver un conflicto usando la violencia no solo es injusto sino cruel. No sirve de nada y debe ser eliminado.”
